El presidente Alberto Fernández afirmó este martes que, cuando llegó al Gobierno, «el 70 por ciento de las obras públicas estaban paralizadas” y afirmó que, con esas iniciativas en marcha, la gestión “busca unir a la Argentina en un tiempo en el que hay que fortalecerse”.
Así lo expresó al inaugurar un nuevo módulo de la Planta Depuradora de Aysa para el tratamiento de líquidos cloacales en el municipio bonaerense de Hurlingham, que beneficiará a más de 300 mil habitantes de la zona.
Fernández consideró además que una «Argentina endeudada que salió de la pandemia y soporta las consecuencias de la guerra sigue creciendo», y afirmó que eso es algo que “no puede parar”, al tiempo que afirmó que a su Gobierno “le tocó un tiempo muy duro”, pero que “nadie nos hará ceder para lograr que se viva cada vez mejor”.